Los pavimentos de Vitoria…
… no siempre salen tan bien como los de los de Burdeos. Ya es hora de que los arquitectos empecemos a aceptar que no todo lo que nos venden para grandes cargas vale para la ciudad y, sobre todo, que, al final, camiones, grúas, furgonetas acaban entrando en todas las calles, peatonales o no, porque tienen que entrar. Es una cuestión de proporción y lo que no funciona a flexión, no funciona a flexíón por mucho que lo diga el catálago. Los adoquines se inventaron por algo. Ahora, que si nos gustan los mosaicos…